Llegué al muro,
crucé mis brazos por la espalda
y apoyé la frente en la fría piedra
piedra de finales, decepciones
piedra de dolor oculto
acciones hirientes que
me arrastraron hacia allí.
Fin del camino
soltar manos tibias
como pichones hambrientos
surfear olas en la marea
de emociones
contener el galope de
los mil jinetes en carrera
loca desde el corazón
apretar los dientes
exclavizar las palabras
para siempre
Mirar como la nada
baila un tango
con el desasociego
en pistas de tristeza
Espadas que no saldrán
se clavarán adentro
estaqueando el orgullo
el honor, las desgracias
Esas desgracias de
mañanas lluviosas
inciertas, raras
presentidas la noche
anterior, llena de indicios
de sospechas
Cual es la culpa del que ama?
es el castigo la pena máxima?
La sangre de mis hijos hecha agua?
Alia Hakima Kader Tetik
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