Mis manos rozan los cardos,cercanos a la vía,atrapando monarcas que viven todavía,muy cerca del molino,de aguas refrescantes,jugaba con mis ramas que siguen como antes...la luna perseguía detrás de los galpones,y allí,se alimentaban animales glotones.Con mi cetro de rama recorría ésa vía,caminando y buscando la morada perdida,un reinado de flores ,de vacas ,de ovejillas,con príncipes ,y hormigas,detrás de la alverjilla...Todo ensueño es posible en la niñez perdida,mi reinado de bichos ,que la hierba esparcía,y el sueño de pensar que hablarían un día.Hoy que dejé el reinado,lo añoro todavía...es que ahora no entiendo como mandar podía, en un reino tan grande... con mi rama tan chica,y encuentro la respuesta ,cuando veo a mi hija, parada con su rama...en medio de la vida...(Mabel Pappano todos los der. res.)
